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2014  |  Resumen de Emile Durkheim

Émile Durkheim (1858-1917) fue un sociólogo francés. Estableció formalmente la disciplina académica y junto con Karl Marx y Max Weber, es considerado uno de los padres fundadores de la sociología.
Durkheim creó el primer departamento de sociología en la Universidad de Bordeaux en 1895, publicando Las reglas del método sociológico. En 1896 creó la primera revista dedicada a la sociología, L'Année Sociologique. Su influyente monografía, El suicidio (1897), un estudio de los tipos de suicidios de acuerdo a las causas que lo generan, fue pionera en la investigación social y sirvió para distinguir la ciencia social de la psicología y la filosofía política. En su obra clásica, Las formas elementales de la vida religiosa (1912), comparó las vidas socioculturales de las sociedades aborígenes y modernas, con lo que ganó aún más reputación.

DURKHEIM. UNIDAD Nº 1. LA SOCIOLOGÍA.

1. El punto de ruptura de la tradicion del pensamiento occidental, se halla en el Renacimiento. El precursor reconocido para este nuevo continente del conocimiento será Nicolas Maquiavelo, cuya obra marca la liberación para la reflexión sobre la política de sus condiciones teológicas o filosóficas.
Lo social y lo político comienza a ser pensado como un proceso de construcción colectiva en el que el hombre precede a la sociedad, la crea y la organiza. Nace la idea del "contrato social" de la soberanía popular y de las formas de representación de esa soberanía que, con distintos matices, recorre el pensamiento político desde el siglo XVI.
La ciencia política es la primera de las nuevas ciencias sociales. El segundo movimiento corresponde a la economía política. Las etapas de fundación de la economía política siguen los ritmos del desarrollo de la sociedad. A partir del siglo XVIII, la atención se dirigía a los problemas de la producción (por el comienzo de la Revolución Industrial).

EL ORIGEN DE LA SOCIOLOGÍA
La sociología es un producto del siglo XIX, aparece ligada a una situación de crisis. Ella propondrá una respuesta conservadora o propulsora de algunas reformas tendientes a garantizar el mejor funcionamiento del orden constituido.
El origen de la sociología se diferencia de las ciencias políticas y de la economía. Sostenidas sobre el principio de la igualdad jurídica de los hombres, construían las teorías que generalizaban las relaciones sociales necesarias al desenvolvimiento del capitalismo.
El nacimiento de la sociología se plantea cuando ese nuevo orden empieza a madurar y aparecen nuevos conflictos distintos a los del pasado, producto del industrialismo.
El estímulo par ala aparición de la sociología es la Revolución Industrial y las crisis que la misma generó política y socialmente.
Con la Revolución Industrial aparece un nuevo actor social: el proletariado de las fábricas.
Aparecen dos vertientes antitéticas: el socialismo (Karl Marx) y lo que configura a la tradición sociológica clásica.
El orden del precapitalismo aseguraba una unificación entre lo social y lo político-jurídico. El capitalismo disolvería esta identidad entre lo público y lo privado, y con ello la idea de la armonía de un orden integrado.
La magnitud de los problemas que plantea la sociedad como objeto de conocimiento impone un abordaje científico. Para estudiar la sociedad, habrá que distinguir un análisis de sus partes y otro de su funcionamiento.
La sociedad puede incluir procesos de cambio pero ellos deben estar incluidos dentro del orden. La tarea a cumplir es desentrañar las leyes que lo gobiernan, contemplarlo y corregir las desviaciones que se produzcan en él. Así, todo conflicto que tendiera a destruir ese orden debía ser prevenido y combatido.

LOS PADRES FUNDADORES
Los pensadores racionalistas del siglo XVII aparecen como un antecedente directo de la sociología,, porque son los primeros que abren un campo de investigación sistemático que lleva a descubrir leyes del desarrollo social.
Montesquieu piensa que es posible construir una tipología de las sociedades basada en la experiencia histórica y ordenada en una sucesión temporal de progresiva complejidad. Este desarrollo creciente de las estructuras económicas y sociales provoca modificaciones en el Estado, cambiando formas de solidaridad entre los individuos, caracterizadas por una división del trabajo.
El antiiluminismo es un pensamiento reaccionario importante para el proceso de constitución de la sociología. Detrás de él se mueve explícitamente una reivindicación del orden medieval, de su unidad, de su armonía.
El pensamiento de Saint-Simon está plagado de tensiones internas que alternativamente pueden ofrecer una perspectiva revolucionaria o conservadora.
El conocimiento científico deberá ocupar en la nueva sociedad el papel que la fe religiosa ocupaba en la sociedad antigua. El sistema industrial del futuro será gobernado autoritariamente por una élite integrada por científicos y por productores en los que Saint-Simon agrupa tanto a los capitalistas como a los asalariados. Esta élite aseguraría la unidad orgánica de la sociedad, perdida tras la destrucción del orden medieval. Su mérito es haber reconocido en las leyes económicas el fundamento de la sociedad.
En 1825 Francia había sido sacudida por una primera crisis general: las consecuencias sociales del sistema industrial comenzaban a estar a lavista y entre 1830 y 1848, la lucha de clases sacudiría al país.
El punto de partida metodológico de la sociología clásica será el postulado de la independencia de los problemas sociales con respecto a los económicos.
Las ciencias sociales fragmentadas se enfrentarán a preguntas que no podrñan responder o que no podrán plantearse porque su formulación depende de una visión globalizadora y dinámica de la totalidad de las relaciones sociales en un modo de producción históricamente determinado.
La autonomía de la sociología será finalmente fundada por Comte. Comte resume ideas ya circulantes en su tiempo y las integra a un discurso totalizador. El objetivo de sus trabajos es contribuir a poner orden en una situación social que definía como anárquica y caótica, mediante la construccion de una ciencia que, en manos de gobernantes, pudiera reconstruir la unidad del cuerpo social.
Comte incorpora a su discurso la idea de la evolución y del progreso. Suponía que los cambios debían estar contenidos en el orden. La sociedad debía ser considerada como un organismo y estudiada en dos dimensiones: la de la Estática Social y la de la Dinámica Social.
La idea de evolución es la del desarrollo sucesivo de un principio espiritual de acuerdo con el cual la humanidad pasaría por tres etapas: La teológica, la metafísica y la positiva (La cual marcaría la llegada al estado definitivo de la inteligencia humana y colocaría a la sociología en una nueva categorización jerárquica). La nueva política positiva sólo podría ser aplicada por una élite autoritaria.
Herbert Spencer (Positivista 1820-1903) intentó aplicar a lo social el método científico natural. Para Spencer no existían diferencias metodológicas en el estudio de la naturaleza y de la sociedad. El principio que unificaba ambos campos era el de la evolución.
La teoría de Spencer consagra el predominio del capitalismo libreempresista y la influencia imperialista británica. Toma de Darwin el principio de la supervivencia de los más aptos y los traslada al campo social para justificar la conquista de un pueblo por otro.
La sociología es un fruto tardío en Alemania, con relación a Francia e Inglaterra. Se creía que los hechos sociales no eran otra cosa más que problemas políticos del Estado.
A fines del siglo XIX, en Alemania, se pone en discusión la legitimidad de la construcción de una ciencia de lo social. Surge así la distinción entre las ciencias de la naturaleza y ciencias del espíritu.
Tonnies postula a la sociología como conocimiento de las relaciones sociales y éstas sólo pueden ser concebidas como producto de la voluntad de los hombres. Dos tipos básicos de relación entre los hombres son los de "comunidad" (familia, vecindario, el grupo de amigos, fundados sobre lazos naturales) y "sociedad" (ciudad, Estado, fundados sobre la racionalidad).
Saint-Simon, Comte, Spencer, Tonnies, comportan en conjunto una suerte de prehistoria de la sociología clásica.

DURKHEIM: EL PROBLEMA DEL ORDEN
Emile Durkheim fue un producto claro de laicismo y del cientificismo de esa Francia republicana que se erigía luego de Luis Bonaparte, de la guerra con Alemania y de la Comuna de París. En ese entorno Durkheim asume una misión: colaborar en la consolidación de un orden moral que le diera a la nación francesa la estabilidad del antiguo régimen, pero fundada sobre otras bases.
El orden moral es equivalente al orden social. Este se expresa como un sistema de normas que se constituyen en instituciones. La sociología es el análisis de las instituciones, de la relación de los individuos con ella.
Durkheim reconoce dos tipos de solidaridad entre individuos: la solidaridad mecánica y la solidaridad orgánica.

1. Emilie Durkheim en su obra “Teoría de la educación y sociedad” comienza buscando una definición al concepto de “educación”, afirma que esta palabra ha sido utilizada para hacer referencia a las influencias que la naturaleza o los hombres pueden ejercer.
Se la ha definido como “todo lo que hacemos por nosotros mimos y todo lo que los demás hacen por nosotros”, según Stuart Mill, quien hace dicha afirmación ya que según él, la educación es la que nos “aproxima a la perfección de nuestra naturaleza”. Pero esta definición genera ciertas confusiones.
El autor afirma que “la acción de los contemporáneos difiere de la que ejercen los adultos de mas jóvenes” y que dicha afirmación es la que conviene atribuir al término “educación”.
Muchos intentaron responder que significaba aquella acción de la nueva generación, pero hay dos respuestas que sobresalieron al resto.
Kant enfatizó que el objetivo de la educación radica en el desarrollo de TODA la perfección de un individuo, pero dicha esta explicación de Kant llevo a ciertos equívocos ya que no se entiende a que refiere cuando menciona la “Perfección”.
La segunda definición corresponde a James Mill, quien dijo que el objeto de la educación es hacer feliz al individuo y a sus semejantes, pero nuevamente cae en la duda ya que hay diversas concepciones de la felicidad y por consecuencia, también el autor se replantea en que se entiende por una vida feliz y completa.
En conclusión de estas afirmaciones, Durkheim asegura que ninguno de estas definiciones es correcta y que la educación varía infinitamente según el lugar y la época en que se desarrolle.
Asegura que el sistema educativo puede comprenderse solo si se tiene en cuenta su contexto histórico, hay ciertas costumbres e ideas que determinan la educación de ese momento, esto no es lo impuesto por una persona sino que son el resultado de una vida pasada, de la historia, religión, política, etc.
El desarrollo de esta educación no la creó una sola persona sino que fueron ciertos procesos, por lo tanto, individualmente, nadie puede intentar siquiera reconstruir la educación. Uno solo puede actuar dentro de la educación para así poder responder y comprender el significado de la misma.


3. Consecuencia de la definición precedente: Carácter social de la educación.

A partir de este punto el autor afirma que de la definición precedente la educación es una socialización metódica y que en cada persona habitan dos seres totalmente distintos. En primer lugar nos encontramos con el ser individual, somos nosotros mismos, nuestras experiencias personales. Por otra parte se encuentra el ser social, este ser esta compuesto por un sistema de ideas, sentimientos y hábitos que expresan en nosotros. Es importante destacar estoy ya que el fin de la educación es formar el ser social. Para ampliar mejor este concepto Durkheim sostiene que la tarea de la educación es tomar un ser nuevo, egoísta y asocial que acaba de nacer y convertirlo en un ser capas de llevar una vida moral y social. Cada nueva generación es una tabla casi rasa sobra la cual debe construir un ser nuevo.
El sociólogo compara a los humanos con los animales y sostiene que comparación de el hombre los animales no necesitan aprender nada mas allá de lo necesario para vivir, principalmente porque los animales viven fuera de todo estado social o forman sociedades bastante simples. En cambio la vida social que practica el hombre requiere de aptitudes demasiado complejas para poder encarnarse y materializarse en nosotros. Es en este punto donde la educación juega un rol fundamental, ya que no pueden transmitirse las diferentes aptitudes de generación en generación por herencia.
Siguiendo mas adelante refiriéndose a las cualidades morales el autor se realiza la siguiente pregunta “¿no hay otras que todo hombre esta interesado en adquirir y busca espontáneamente? Respondiendo a dicha pregunta Durkheim afirma que la educación responde ante todo a las necesidades sociales, ya que hay sociedades donde tienen cultivadas cualidades totalmente distintas o han sido entendidas muy diferentemente. Un ejemplo claro es lo que ha ocurrido con la ciencia en las diferentes sociedades, muchas culturas no reconocían la cultura intelectual. El sociólogo explica que el hombre no posee un “apetito instintivo” de la ciencia, sino que, la buscan y desean a medida que no pueden seguir sin ella. Para desarrollar mejor este concepto el autor utiliza las palabras del famosos filosofo Rousseau el cual sostiene que si el hombre no hubiera tenido otras necesidades además de las de sensación, experiencia y instinto, no hubiera recurrido a la búsqueda de la ciencia. Hasta aquí el autor ha mencionado las cualidades intelectuales, pero siguiendo mas adelante nombra las cualidades físicas y afirma que mientras el estado del medio social se incline al ascetismo, la educación física será desplazada a un segundo plano. Hoy en día solo tiene una finalidad higiénica y la preocupación de contener los peligrosos efectos de una cultura intelectual demasiado intensa.
Como dijimos anteriormente la educación responde de acuerdo a las necesidades sociales, por lo tanto es posible que parezca que los individuos que componen una determinada sociedad estén sometidos a una insoportable tiranía. Pero Durkheim interrumpe dicho pensamiento y afirma que, los hombres están interesados en esa sumisión, debido a que a través de ella se puede obtener lo mejor de cada uno. Por lo tanto Durkheim sostiene que “el hombre, en efecto, no es un hombre sino porque vive en sociedad”. A partir de esto se puede decir que si hay un hecho históricamente establecido es que la moral esta totalmente relacionada con las sociedades y que las mismas nos sacan fuera de nosotros y nos hace tener en cuenta otros intereses además de los nuestros.
Volviendo sobre el tema de la ciencia según las palabras del autor podemos notar que la misma es quien elabora las nociones cardinales que denominan nuestro pensamiento, es una obra colectiva, ya que requiere una cooperación de todos los sabios que encontramos a lo largo de la historia. Anteriormente la religión cumplia el mismo rol y es de aquí de donde se hereda la ciencia. Aquí el autor se detiene y nombra el importantísimo rol que cumple la lengua. Sin el lenguaje, no tendríamos por así decirlo ideas generales, nos permite elevarnos mas allá.
Tomando como ejemplo la religión y la ciencia podemos notar que la sabiduría humana se acumula sin términos y esto es posible en y por la sociedad, que actúa como personalidad moral que dura a lo largo de las diferentes generaciones y las vincula las unas con las otras. Para finalizar con este punto el autor expresa que el individuo al querer la sociedad se quiere a si mismo. Esto se debe a que la sociedad a especialmente a través de la educación lo agranda y lo convierte en un ser verdaderamente humano y que para ello se requiere de esfuerzo y sobre todo de voluntad.

4. El papel del Estado en materia de educación

En materia de educación, a los deberes y los derechos del Estado, se les oponen los derechos de la familia. El niño es de sus padres; a ellos les pertenece dirigir su desarrollo intelectual y moral. Desde este punto de vista, tendemos a reducir al mínimo la participación del Estado en la materia. Sólo debe limitarse a servir de auxiliar a las familias, incluso, haciendo su tarea lo más fácil posible, y poniendo a su disposición escuelas a las que puedan enviar a sus hijos, si así lo desean. Pero debe encerrase en esos límites y prohibirse toda acción que imprima una orientación determinada en los jóvenes. Ya que, si la educación tiene una función colectiva, si tiene por objeto adaptar al niño al medio social en que está destinado a vivir, es imposible que la sociedad se desinterese de tal operación. Es a ella, pues, que corresponde recordar al maestro cuáles son las ideas, los sentimientos que hay que imprimir en el niño para ponerlo en armonía con el medio en que debe vivir. Es necesario que la educación asegure entre los ciudadanos una comunidad suficiente de ideas y de sentimientos sin los cuales toda sociedad quedaría abandonada al servicio de creencias particulares y, por lo tanto, la patria quedaría dividida.
Desde el momento en que la educación es una función esencialmente social, el Estado no puede desinteresarse de ella. Por el contrario, todo lo que es educación debe de estar, en alguna medida, sometido a su acción, incluso las escuelas que no dependen del Estado. No hay ninguna escuela que pueda reclamar el derecho de dar con toda libertad una educación antisocial.
Es preciso reconocer que el estado de división en que se encuentra actualmente nuestro país, hace delicado ese deber del Estado y, a la vez, lo hace más importante. Estamos divididos entre concepciones divergentes e incluso contradictorias. Pero, a pesar de todas las diferencias, hay en la base de nuestra civilización, ciertos principios que son comunes a todos y que, muy pocos se animan a negar abiertamente y de frente: el respeto por la razón, por la ciencia, por las ideas y los sentimientos que están en la base de la moral democrática. Por lo tanto, el papel de Estado consiste en separar esos principios esenciales, en hacerlos enseñar en sus escuelas, en velar porque en ninguna parte queden ignorados por los niños y en que en todas partes se hable de ellos con el respeto que les es debido.