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Resumen para el Primer Parcial B  |  Semiología (2023)  |  UBA XXI
Semiologia: Primer parcial

Anteriormente a la semiología, la filosofía era la encargada de estudiar los signos. Aunque desde una perspectiva particular, no le importaba el aspecto comunicativo de los signos, sino más bien el aspecto ontológico, es decir su relación con el ser.

La semiología es la ciencia o el conjunto de conocimientos que analizan y explican los signos y los fenómenos comunicativos, los sentidos y las significaciones que se producen en la sociedad a través de la actividad de la semiosis.

Semiología: Fue bautizada con este nombre por Saussure. Desde la lingüística estudia la vida de los signos en el seno de la vida social.

Semiótica: Peirce introdujo el término semiotics para indicar el estudio de los signos. Concibió la semiótica como un campo científico articulado en torno a reflexiones de carácter lógico filosófico que tuviera como objetivo de su investigación la semiosis.

Un signo es “Algo que está en lugar de otra cosa” es decir, un objeto presente se relaciona con otro que está ausente. Es una forma física por la cual se hace perceptible a los sentidos.

Definición clásica de signo (según Zecchetto)
Un signo es todo lo que está en lugar de otra cosa y la significa, es la marca sensible de una intención de comunicar un sentido, se origina de la presencia del signo y la ausencia del objeto que denota. Fuera de una sociedad, los signos no existen. ¿Qué es el significado de un signo? Es el conjunto de sentidos consensuados en torno a un objeto semiótico.

La semiosis
Es el proceso de aprehensión del signo, se desarrolla de forma espiral, integrando nuevos procesos semióticos.

Ferdinand de Saussure
Define al signo como una unidad lingüística que posee una composición diádica:

Significante: Siempre es algo material, puede ser acústico o visual, es la parte sensible que captamos con los sentidos. Es la parte material del signo lingüístico.

Significado: Es la idea o concepto evocada en la mente. Es inmaterial, si esto no se cumple, el referente no forma la estructura del signo.

El lenguaje es una capacidad humana universal para expresar pensamientos y sentimientos a través de los signos. Tiene un lado individual y un lado social.

Ferdinand Saussure divide al lenguaje en lengua y habla, y solo va a dedicarse al estudio de la lengua, a la cual define como un sistema de signos que utilizamos para comunicarnos.

La lengua es el objeto de estudio de la lingüística, es decir, la parte esencial del lenguaje. La lengua según Saussure es exterior al hablante, por lo cual es incorrecto decir que es una facultad física. Es un sistema de signos que son aceptados por una comunidad y constituyen un idioma. Los individuos necesitan aprenderla para comprender y conocer su funcionamiento. Por su uso en el paso del tiempo, puede ser modificada por la comunidad de hablantes. Es un producto social de la facultad del lenguaje.

El habla es un acto individual de voluntad e inteligencia. Es el acto individual de apropiación de la lengua por parte de un hablante. Es la lengua puesta en acto.

El signo lingüístico es la unión entre un concepto y una imagen acústica. Es una unidad formada por significado y significante. Es la unidad mínima del sistema de la lengua.

El signo es arbitrario con relación al significado, es decir, no existe motivo o razón por el cual exista una relación entre significante y significado. La arbitrariedad es la cualidad por la cual la masa hablante requiere de la normalización para su uso, en tanto la relación entre el significado y el significante es inmotivada.

El signo es lineal porque el significante se desenvuelve sucesivamente en el tiempo, es decir, no pueden ser pronunciados en forma simultánea. Es una característica del significante que implica una extensión en el tiempo, formando una cadena.

El signo es inmutable. El significante es elegido libremente con relación a la idea que representa, pero impuesto con relación a la comunidad lingüística que lo usa.

Dinámica de los signos Binarios, según Saussure:
Sincronía: Significa contemporaneidad, y se asume como criterio para el estudio sistemático de los signos o hechos lingüísticos. El eje sincrónico permite estudiar el sistema completo de la lengua en un momento histórico particular.

Diacronía: La diacronía se refiere a la historia, a las relaciones en el tiempo. El eje diacrónico permite estudiar cómo un elemento particular se modifica en el transcurso del tiempo. Es decir que no podemos estudiar todo el sistema completo desde esta perspectiva, sino que tenemos que enfocarnos en algo puntual.

Sintagma: Es la lectura de los signos puestos en relación de presencia. Es la estructura dada de cada signo, los sintagmas constituyen el eje horizontal de una estructura. Sobre él se disponen linealmente los signos en presencia.

Paradigma: Es el modelo teórico que explica una estructura de signos o una cadena sintagmática. El plano del paradigma forma el eje vertical e invisible que atraviesa el plano sintagmático. Son relaciones que se dan en el cerebro de los hablantes y arman redes.

Saussure denominó “relaciones asociativas” a los paradigmas lingüísticos. La relación entre los ejes sintagmáticos y paradigmáticos son estrechas, cada aspecto es dependiente del otro y constantemente interactúan entre sí. Son relaciones que se dan en el cerebro de los hablantes y arman redes.

Se atribuye a la lengua todos los tipos de sintagmas construidos sobre formas regulares:

Relaciones sintagmáticas: Se les llama así a los elementos alineados uno tras otro en la cadena del habla, se compone de dos o más unidades consecutivas. Combinan elementos de manera sucesiva en un enunciado.

Relaciones paradigmáticas: Los grupos formados por asociación mental no se limitan a relacionar los dominios que presentan algo de común. Son relaciones definidas por su capacidad de conectar mentalmente a los signos por una característica compartida.

Charles Pierce
La función del signo consiste en ser "algo que está en lugar de otra cosa bajo algún aspecto o capacidad". El signo es una representación por la cual alguien puede mentalmente remitirse a un objeto.

La realidad debe ser interpretada desde el punto de vista pragmático como si se tratara de una cualidad. El signo, según Peirce, está formado por 3 elementos (El Representamen, El Interpretante y El Objeto)

El signo en Peirce recibe el nombre de representamen, este es una “cualidad material” que está en lugar de otra cosa, su objeto, de modo que despierta en la mente de alguien un signo equivalente o más desarrollado, el interpretante, que aclara lo que significa el representamen y a su vez representa al mismo
objeto.

El interpretante: Es otra representación que se refiere al mismo objeto que el representamen puede asumir diversas formas.

El objeto: Para que algo sea un signo debe “representar” a otra cosa, llamada “objeto”

Principio de pragmatismo: La creencia en la verdad de un concepto determina hábitos de conducta.

Semiosis infinita: Un signo, no está aislado, sino que integra una cadena de semiosis: cada signo es a la vez interpretante del que lo antecede e interpretado por el que le sigue. Como todos los pensamientos son signos, se remiten unos a otros: “todos los pensamientos deben dirigirse ellos mismos a otros pensamientos, puesto que tal es la esencia del signo”

Icono, índice y símbolo
Las categorías aplicadas al objeto permiten obtener estos tres tipos de signos. La división entre ícono, índice y símbolo depende de las diferentes relaciones posibles de un signo con objeto dinámico.

Icono: Es un signo que entabla una relación de semejanza con su objeto, se trata de un signo por similitud con cualquier cosa a la cual sea parecido. Un icono es un representamen que por su cualidad es similar a su objeto. (Las imágenes, los diagramas, las metáforas.)

Índice: Es un signo que no se basa en cualidades sensibles del objeto, sino en una conexión espacio-temporal. Se refiere o se acerca al objeto. Coexiste con el objeto al que representa. Puede ser simultáneo, anterior o posterior a esa existencia. Son signos que tienen conexión física real con el referente, es decir, con el objeto al que remiten; la conexión puede consistir en la proximidad, la relación causa efecto o en cualquier tipo o conexión. Es un signo que mantiene una conexión dinámica con el objeto al que representa

Símbolo: El símbolo es un signo consciente, arbitrario y convencional que tiene carácter colectivo y social. Es un representamen que se refiere a su objeto dinámico por convención, hábito o ley. Se caracterizan porque denotan clases de objetos. Todos los signos que integran un sistema convencional, son signos.

Relación icónica: Exactamente lo que está en la imagen. En un cartel de obra vemos una figura humana con pala.
Relación simbólica: Lo que nosotros interpretamos cuando la vemos. La figura humana con pala significa obra.

Kerbrat-Orecchioni
Es inexacto decir que el emisor, al confeccionar su mensaje, elige libremente entre los ítems léxicos, sintácticos, etc. de sus aptitudes lingüísticas y dice lo que quiere. Tiene limitaciones que restringen sus posibilidades de elección:

Homogeneidad del código: Es imposible que el destinador y destinatario hablen exactamente la misma lengua, es decir, un código común; no es posible que el mensaje pase de destinador a destinatario sin sufrir modificaciones, cambia al ser decodificado. Existen tensiones que rompen con la noción de una lengua común.

Restricciones del universo discursivo: Situación en que están el emisor y el receptor, determinados por las restricciones propias del género elegido; el emisor elige determinadas palabras para realizar su discurso, teniendo en cuenta a su receptor (y su saber sobre el tema, léxico, etc.).

Exterioridad del código: Las competencias implican la suma de las posibilidades lingüísticas para producir o interpretar. Es inexacto decir que el emisor, al confeccionar su mensaje, elige libremente entre los ítems léxicos, sintácticos, etc. de sus aptitudes lingüísticas y dice lo que quiere. Los códigos se internalizan en el sujeto antes de ponerlos en uso. Tiene limitaciones que restringen sus posibilidades de elección:

Competencias lingüísticas: Dan cuenta del conocimiento que tiene el sujeto sobre su lengua. Cada uno maneja cierto vocabulario, conoce algunas palabras y otras no.

Competencias Paralingüísticas: Incluyen las determinaciones psicológicas. A la hora de acompañar la palabra con cierto "lenguaje" corporal hay quienes son más locuaces que otros.

Competencias de orden cultural: También se le conoce como competencia enciclopédica. No todos tenemos el mismo capital disponible en ese aspecto y tal vez el otro me habla de una idea que yo desconozco o conozco mal.

Competencias de orden ideológico: Refiere a los sistemas de interpretación y de evaluación del universo referencial. La misma idea que tenemos sobre cómo se organiza el mundo incide en lo que estoy en condiciones de decir o entender.

Escandell Vidal
Se entiende por pragmática al estudio de los principios que regulan el uso del lenguaje en la comunicación. Esta es una disciplina que toma en consideración los factores extralingüísticos que determinan el uso del lenguaje, precisamente todos aquellos factores a los que no puede hacer referencia un estudio puramente gramatical

Significado convencional: Cuando hablamos de un “significado convencional” estamos dando por sentado
que las lenguas naturales funcionan como códigos. La lengua establece una relación diádica, convencional y arbitraria entre representaciones fonológicas y representaciones semánticas (significantes significados respectivamente).

Estas dos ideas pueden resultar útiles en algunos momentos y para algunos propósitos concretos, pero dibujan sólo un esquema muy simplificado de la comunicación y en este punto surge el problema del Significado no convencional: Cuando cambiamos el significado de las palabras, genera un choque entre lo que se dice y lo que se quiere decir. Las palabras pueden tener un valor diferente al que les asigna el sistema. No siempre existe correspondencia absoluta entre las representaciones fonológicas y la interpretación.

Sintaxis y Contexto: El orden de las palabras (sintaxis) está determinado por factores de tipo contextual (situacional); este orden sintáctico responde a la intención del interlocutor con respecto a su destinatario. Comúnmente está asociado al orden de las palabras y la morfología. El orden de las palabras puede afectar el significado de lo que se quiere comunicar.

Referencia y Deixis: Comprender una frase no consiste simplemente en recuperar significados, sino también en identificar referentes. No basta con entender las palabras; hay que saber a qué objetos, hechos o situaciones se refieren. Parte importante de la interpretación de un gran número de enunciados depende decisivamente de los factores extralingüísticos que configuran el acto comunicativo.

Los tipos de elementos que configuran la situación comunicativa se dividen en dos tipos según Escandell Vidal:

De naturaleza material (El componente material): Son entidades objetivas, descriptibles externamente. Tiene entre sus elementos la situación espacio temporal y a la persona a la cual el emisor dirige su enunciado. Entre ellos encontramos:

El emisor: Persona que produce intencionalmente una expresión lingüística en un momento dado, ya sea oralmente o por escrito. Se refiere a un sujeto real, con sus conocimientos, creencias y actitudes, capaz de establecer toda una red de diferentes relaciones con su entorno.

El destinatario: Persona (o personas) a la(s) que el emisor dirige su enunciado y con la(s) que normalmente suele intercambiar su papel en la comunicación de tipo dialogante. La palabra destinatario solo se refiere a sujetos y no a simples mecanismos de decodificación. El destinatario es la persona a la que se ha dirigido un mensaje. El sujeto es elegido por el emisor para el intercambio.

El enunciado: Expresión lingüística que produce el emisor. Desde el punto de vista físico no es más que un estímulo, una modificación del entorno ya sea auditivo o visual. Frente al término mensaje el entorno se usa más específicamente para hacer referencia a un mensaje construido según un código lingüístico. Implica la actualización de la oración en una situación concreta

El entorno: Es el soporte físico, el “decorado” en el que se realiza la enunciación. Implica una situación espaciotemporal en la que se realiza la enunciación. Sus factores principales son las coordenadas de lugar y tiempo. Es un factor determinante en la mayoría de los casos: las circunstancias que imponen el aquí y ahora influyen decisivamente en toda una serie de elecciones gramaticales y quedan reflejadas habitualmente en la misma forma de enunciarlo. Está definido pragmáticamente de acuerdo con criterios discursivos.

De naturaleza inmaterial (componentes relacionales): Se trata de los diferentes tipos de relaciones que se establecen entre los primeros. Las relaciones que se establecen dan lugar a conceptualizaciones subjetivas; estas, generan principios reguladores de la conducta que se objetivan en forma de leyes empíricas. Estas son:

La información pragmática: Conjunto de conocimientos, creencias, supuestos, opiniones y sentimientos de un individuo en un momento cualquiera de la interacción verbal. Comprende todo lo que constituye nuestro universo mental, desde los más objetivos a las manías más personales. La información pragmática de cada individuo es radicalmente diferente de la de otros. Tiene naturaleza subjetiva.

La intención: Por un lado, se trata de la relación entre el emisor y su información pragmática y por el otro de la relación entre el destinatario y el entorno. Se manifiesta siempre como una relación dinámica, de voluntad de cambio. La actividad humana es reflejo de la actitud del sujeto en su entorno.

La relación social: Remite a la relación entre los interlocutores. Existe entre los interlocutores por el mero hecho de pertenecer a una sociedad. Su papel en la comunicación es fundamental, ya que el emisor construye su enunciado a la medida del destinatario. Uno de los factores que debe tener en cuenta, es el grado de relación social entre ambos. Esta impone una serie de selecciones que determinan la forma del enunciado.

Mijaíl Bajtín
Género discursivo
Es un tipo relativamente estable de enunciado que usamos en diferentes ámbitos de la comunicación (facilita la tarea de comunicarnos) no hace falta información teórica para usar los géneros discursivos, naturalmente los reconocemos. Es imposible clasificarlos debido a su cantidad.

Géneros primarios: Géneros de la comunicación discursiva inmediata, más simples, ligados a la oralidad; al ser absorbidos por géneros secundarios, mantienen su forma e importancia cotidiana sólo como parte del contenido del género secundario. Ej: una carta, un diálogo cotidiano.

Géneros secundarios: Surgen en condiciones de comunicación cultural desarrollada, organizada, generalmente escrita (comunicación artística, científica); absorben y reelaboran géneros primarios. Se denominan “ideológicos “por la capacidad de estos géneros de mostrar una determinada mirada sobre el mundo (por su complejidad, su elaboración, etc.) Simplemente son géneros más elaborados y complejos que nos permiten comunicar nuestras ideas y pensamientos de una manera más efectiva. Ej.: novelas, investigaciones científicas, géneros periodísticos, etc.

John Austin
Enunciado realizativo: Es un tipo de enunciado que no describen ni registran nada y no son ni verdaderos ni falsos. El acto de expresar la oración es realizar una acción.

Enunciado constatativo: Es un enunciado que describe un estado de cosas o un hecho, de tal suerte que puede ser evaluado como verdadero o falso. Los enunciados constatativos tienen una función cognitiva, relatan y describen hechos. Puede ser un acto:

Locucionario: Posee Significado.

Ilocucionario: Posee fuerza al decir algo. Cuando queremos saber algo, por convención, sabemos que tenemos que manifestar esa duda a través de una pregunta, la cual tiene un formato gramatical y una entonación particular. Son convencionales.

Perlocucionario (No son convencionales, nunca podemos estar seguros de qué reacción va a suscitar nuestro enunciado en el receptor) Lograr ciertos efectos por el hecho de decir algo.

Austin denomina enunciados constatativos a aquellos que contienen una información que puede ser considerada verdadera o falsa, los realizativos, en cambio, son ellos mismos una acción, hacer la acción es emitir el enunciado; no tienen valores de verdad o falsedad sino de adecuación o inadecuación al contexto de enunciación.

En ningún caso se dice que la expresión es falsa, sino que ella, o más bien el acto (por ejemplo, la promesa) es nulo, o hecho de mala fe. Austin considera que es una falacia reducir ciertas expresiones a las nociones de verdad o falsedad, ya que dependerán de las circunstancias en cual fueron dichas. Prefiere utilizar el criterio del infortunio

 

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