Altillo.com > Exámenes > UBA - Económicas > Historia Económica Argentina

Historia Ec. Argentina

Resumen: La política y la Sociedad Argentina (1870 – 1916) Cátedra: Villaruel

2º Cuat. del 2008

Altillo.com

La política y la Sociedad Argentina (1870 – 1916)

 

Argentina en la década de los setenta

En 1869, vivían en argentina 1.800.000 personas, lo que daba 0.43 habitantes por kilómetro cuadrado. El 78.6 por 100 de los argentino vivían en míseros ranchos de barro y paja, y el 77.9 por 100 de los mayores de 6 años no sabia leer.

El desierto, esa obsesión de los argentinos, no solo se mostraba indócil por la existencia de distancias económicamente infranqueables, sino también por la indómita resistencia armada de las tribus indias que lo habitaban. Hasta bien avanzada la década del 70, las invasiones de los indios fueron una permanente pesadilla para las autoridades y productores rurales. El presidente Avellaneda decía: “la cuestión de la frontera es la primera para todos … es el principio del fin… suprimir los indios y la frontera significa…poblar el desierto”.

Este periodo se caracterizo por fuertes disputas entre los 2 partidos porteños (Partido nacionalista y Partido Autonomista. En 1877, el presidente Avellaneda intento superar la crisis institucional mediante la llamada política de la conciliación, pero para las elecciones de 1880, los argentinos volvieron a dividirse en 2 bandos irreconciliables. Unos apoyaban a Roca y otro apoyaban a Tejedor.  La compleja situación institucional se agravaba por la debilidad del poder central.

El General Roca capitalizo un estado de animo cada vez mas Difundido.  Pudo así formar una coalición política de extensión inusitada para la época. Contaba con el respaldo de la mayoría de los oficiales  del ejercito nacional. La recién formada liga de los gobernadores le aseguraba el apoyo de casi todas las provincias. Roca y sus partidarios salieron triunfantes de la gran confrontación del año 1880. La clave del éxito debe buscarse en la amplitud y solidez de la coalición política que se gesto en los tres últimos años de la década de los setenta.

Roca inauguró las sesiones parlamentarias de 1881. Los años posteriores se caracterizaron por la aprobación de una serie de leyes que transpasaron vertiginosamente atribuciones al poder central. Se federalizo la ciudad de buenos aires, Se afianzó el ejercito nacional suprimiendo las milicias provinciales, se unifico la legislación monetaria y se privo a las provincias del derecho a emitir dinero. La educación primaria y el registro de personas pasaron a jurisdicción de las autoridades nacionales. Una serie de leyes reorganizaron la justicia, el régimen municipal y otras esferas de la administración publica, cerrando asi un ciclo  legislativo sin par en la historia de la república.

Asegurados el orden y seguridad jurídica, una coyuntura internacional particularmente favorable desato un boom económico de características y duración inusitadas.

 

 

La sociedad (1869 – 1914)

Argentina tenia 1.736.490 habitantes en 1869 (primer CENSO) y alcanzo la cifra de 7.885.237 en 1914. El incremento de la población fue la masiva entrada de inmigrantes extranjeros, la mayoría provenía de Italia y España. De los que se radicaron permanentemente, una altísima proporción lo hizo en las provincias del litoral pampeano. ( Capital Federal, buenos Aires, Santa Fe, Cordoba y Entre Rios).

Además del rápido crecimiento en las ciudades, se registro un aumento considerable del numero de pequeños poblados en el litoral pampeano. Este fue uno de los factores que, junto a la expansión del ferrocarril, contribuyo a paliar el secular aislamiento de las zonas rurales.

La entrada masiva de inmigrantes produjo cambios significativos en la estructura socioocupacional  del país. En el periodo intercensal 1869-1895 la expansión del sector agrícola y kas actividades terciarias coincidió con una fuerte caída en la ocupación de viejas artesanías y en el vetusto sistema de transportes. En el periodo siguiente (1895-1914) la mecanización de la agricultura y el aumento de tamaño de la empresa cerealera produjeron una caída relativa en los niveles de empleo del sector primario.

La disparidad entre el sector urbano y el rural respondia al hecho de que el comercio y la industria estaban concentrados en la misma región, donde se hallaba radicada la gran mayoría de los inmigrantes. Por el contrario, las empresas rurales se distribuían homogéneamente en todo el país.

De los inmigrantes que se radicaron permanentemente, no todos accedieron a posiciones superiores o intermedias dentro de la sociedad. Muchos siguieron en las mismas labores que venían ejerciendo desde su llegada.

Los salarios percibidos eran mucho mas altos que los vigentesen los países de origen. Debido a esto  argentina conoció las llamadas migraciones ultramarinas de carácter estacional. Eran los famosos “golondrinas” que venían de Italia para los tres meses de cosecha.

Los avances en materia de legislación laboral fueron tímidos y lentos, aunque se dictaron leyes sobre descanso dominical y feriados nacionales, se reglamento el trabajo de mujeres y niños y se legislo sobre accidentes laborales. En el periodo también se registraron disminuciones en la jornada laboral, y hacia 1916, casi todos los gremios habían conseguido la jornada de 8 horas.

La reorganización y modernización ganadera modifico notoriamente los ritmos de trabajo y el estilo de vida prevaleciente en otras épocas. La desaparición de la frontera india, la creciente comercialización de todos los productos de la ganadería y el impresionante desarrollo del cercado de campos fueron estableciendo ritmos de trabajo menos erráticos y limitaron la gran movilidad que caracterizo la vida en los distritos ganaderos. A pesar de las distorsiones pintorescas y románticas, la literatura de la época reflejo algunos de estos aspectos en la nostálgica evocación del pasado del gaucho rioplatense.

En 1854 se formo la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y aparecieron gran cantidad de cámaras sindicales mercantiles. En 886 se formo la Union industrial Argentina. Hacia Fines de siglo, el sindicalismo avanzo lento y errático, para hacerlo vertiginosamente durante la primera década del siglo XX. En 1901 se formo la FOA (Federación Obrera Argentina) que fue reemplazada poco después por la FORA (Federacion Obrera Regional Argentina) controlada por Anarquistas. En 1907 se formo la UGT (Union General de Trabajadores) que fue una entidad minoritaria que agrupo a sindicatos con tendencia Socialista. En 1866 se formo la Sociedad Rural Argentina y en 1912 la Federacion Agraria Argentina.

Hubo enfrentamiento entre empleados y empleadores, y entre  sindicatos y autoridades nacionales. Entre 1907 y 1916, hubo 1290 huelgas, de las cuales  cinco fueron de Carácter General.

Los sectores mas afectados por los paros obreros fueron los de la industria de la madera, la confeccion, construcción, alimentación metalurgia y textiles. La demanda permanente de estas huelgas fie la derogación de la llamada “Ley de residencia (1902)” que facultaba al poder ejecutivo a expulsar a los extranjeros que considerara peligrosos para la seguridad interior.

De fundamental importancia fue el papel jugado por la educación primaria (Ley 1.420) que creo una escuela publica sin distingos étnicos y religiosos, y que doto a la enseñanza de un fuerte contenido Integrador para inmigrantes y nativos.

El liberalismo seguía siendo el credo predominante en los grupos dirigentes de la vida cultural, social, económica y política.

La Politica entre 1880 y 1912

A partir de 1880, argentina vivio un periodo de estabilidad política de duración inusitada. El triunfo del Gral. Roca en los combates de 1880 fue seguido de una vasta lagislacion  durante su presidencia (1880-1886) y la de su sucesor (Juarez Celman 1886 - 1890). Al mismo tiempo, en 1880 se formo el PAN (Partido autonomista Nacional).

El gobierno central mantuvo el control sobre las situaciones provinciales mediante un ajustado sistema de premios y castigos, destinados a lograr un delicado equilibrio entre la necesidad de obtener apoyo de gobernadores y el deseo de evitar la repetición de acciones sediciosas.

Los principios liberales de la constitución permitieron el desarrollo de una prensa sumamente influyente que vigilaba atentamente los actos de las autoridades nacionales.

La indiferencia política era el estado de animo preponderante en la mayoría de la población. Los comicios estaban mas de una vez, matizados por diversas triquiñuelas y Fraudes, bastante comunes en la época. El fraude no era, desde luego, aplicado sistemáticamente, porque la apatía de la población lo tornaba innecesario. Para que el fraude fuera eficaz, quien lo realizara debía contar con sólidos apoyos entre la clientela política y poseer una organización bien montada. Esta organización era comandada por un “Caudillo” de distritos rurales o barrios urbano. La recompensa para estos caudillos eran desde  pequeños favores personales  hasta la obtención de empleos. Los caudillos provenían desde los mas variados orígenes (pequeños terratenientes o comerciantes, mayordomos de estancias y as habitualmente oficiales del ejercito retirados) y a pesar que a veces desempeñaban pequeños cargos políticos, se conformaban con ejercer el poder en su región.

En 1890 se formo la Union civica. Al poco tiempo esta agrupación se dividió en 2: Union Civica Nacional y Union Civica radical. Este ultimo sufrió varias internas, para luego posicionarse como el principal partido de oposición al régimen.

 

El ocaso del Regimen (1912 – 1916)

Se sanciona la ley Saenz peña en 1912.

La UCR accedió al gobierno en las elecciones presidenciales de 1916. El padrón y el control del comicio paso a manos del ejercito en esas elecciones. La participación electoral en las elecciones de 1912, 1913, 194 y 1916. Entre 1912 y 1914, los radicales obtuvieron algunas gobernaciones y los socialistas se impusieron en 2 ocasiones (1913 y 1914) en la capital federal.